Embrujo
Entonces sonó el timbre y supe que era él,
con su sencillez, con la palabra perfecta en el momento oportuno; lo veía, pero no sabía que era lo que embrujaba, era esa mirada quizas; mirada que desnuda con ternura; no, tal vez, su boca dulce, aunque solo escuchar el timbre de su voz era exitante.
Que era? , no lograba entender tan placentera sensación de tenerlo cerca; pensé al verlo…. hombre gentil de seductora sonrisa, de amenos momentos y tristezas perdidas; hombre amante del conocimento y la poesía, caballero enigmático de celosa intimidad, de caminante seguridad y coraza de hierro.
Volví a verlo y entendí el embrujo; era su reflejo, veía su corazón; tan humano, tan sensible, tan niño a la vez; tan loco y tan cuerdo; vi su dolor pero su fortaleza también; conocí al ser, a la ternura, a la nostalgía, comprendí su sentir ; que hermoso es entender su corazón, un corazón de un hombre bueno…un gran embrujo para mí.